Algún día aprenderé que mi belleza no es lo primero.
Algún día aprenderé que la tristeza aporta menos puntos que la alegría.
Algún día aprenderé que las palabras sólo son susurros de un viento que vuela lejos,
que los errores de la vida siempre nos enseñan algo,
y que los cigarrillos no aportan glamour a mis manos.
Mientras tanto, sigamos engañándonos.
Algún día aprenderé que la tristeza aporta menos puntos que la alegría.
Algún día aprenderé que las palabras sólo son susurros de un viento que vuela lejos,
que los errores de la vida siempre nos enseñan algo,
y que los cigarrillos no aportan glamour a mis manos.
Mientras tanto, sigamos engañándonos.